lágrimas negras

lágrimas negras son las que se vertieron en, mínimo, tres puntos del planeta: las primeras, sobre la cancha, cuando arabia saudita, después de remontar un partido que en el primer tiempo parecía imposible, empató sobre la hora porque un tunecino se inspiró. la segunda, en el país de mahoma, la meca, los pozos de petróleo y los petrodólares. parece que el rey fahd o su sucesor o quién quiera que domine el harén más grande de la tierra lloró oro negro y automáticamente sus colaboradores reunieron tres barriles de crudo. pero las lágrimas más sonoras se producieron en maranello, cuando lucas de montemezolo y la cúpula de ferrari se quedó con las ganas de vender 23 ferarris edición limitada porque, también automáticamente, el dueño de arabia decidió no recompensar nada a sus súbditos porque empataron de cagones. el partido, por otra parte, fue entretenido si se quiere, entretenido como puede ser un chicago-platense pero mucho más glamoroso dado el entorno en el que se produce. eso, también, es lo que hace lindos -o no- los partidos de este mundial. un mundial que hasta ahora se está demostrando muy interesante para ver, mucho más entretenido que lo visto desde italia hasta japón-corea.

no, ni en pedo

me niego hablar del triunfo de españa. primero, porque no lo vi. en ese momento johnny depp me estaba castigando con una película que se llama el libertino pero que, providencialmente, me salvó de ver la victoria de mi equipo más odiado. no soporto a los gallegos jugando al fútbol (sumale a nadal y a alonso). la razón es inexplicable, como piensa también hernanii.es más, si me das a elegir entre una elminiación humillante de españa en primera ronda y derrota de argentina en una final contra brasil, quizás lo pienso. bueno, no, pero date cuenta de qué tipo de odio le tengo. por otra parte, viendo un resumen, me empelotó saber que ucrania no hizo nada pero, como si eso fuera poco, el referi les croba a los gallegos un penal inexistente, dando pie encima para echar a un amarillo. da bronca, che. y que puyol, él sobre todo, haga una jugada de antología... es mucho para mi maltrecho corazón. repito, entonces, menos mal que estaba viendo una pésima película.

rta.

(aclaración necesaria: el siguiente post bajo ningún concepto es un ataque a una persona muy querida. muy al contrario.)
nuestro flamante compañero de tareas hace un llamado al orden un post más abajo. el está cansado de la gente que habla de jugar bien a la pelota pero que no sabe lo que es eso... y eso lo dice una persona que recibió su cultura futbolística viendo al boca de bianchi, un equipo sin dudas ganador pero que, de jugar bien, ni hablar. pero bueno, no estoy para polemizar con él directamente pero sí con su frase sobre "estoy cansado de escuchar mucha gente hablando de jugar bien al futbol cuando creo que no saben que es eso". ¿qué es jugar bien al fútbol? jugar bien al fútbol, supongo, es antes que nada, desarrollar un esquema de partido que se ajuste a las posibilidades reales de los jugadores, en los que cada uno, aún con improvisaciones, se amolda a un todo en pos de un objetivo común, ganar. ¿suena a estupidez? lo sé. jugar bien al fútbol también es no descuidar los puntos flojos y, si eso ocurre -como puede ocurrir todo el tiempo- no traslucir que se está ante una debacle de proporciones bíblicas (decime si nadie, en los últimos diez minutos contra los marfileños, no pensó en los partidos de inglaterra y croacia y sus goles en tiempo de descuento). entonces, después de haber dominado gran parte del partido, terminar colgados del travesaño con un pescador a lo ñaco arriba, creo, es jugar mal. jugar mal también es tener pocas ideas, con un armador que sólo se prende en dos oportunidades -para rollo fueron cinco, yo podría descontar una de las dos porque la del tiro libre, rollo, no vale- y listo. con dos goles ganás, sólo si es que el otro no te hace más. otra obviedad más, pero no te olvides de que en el arco está el pato, que tuvo una noche excelente el otro día y que espero que repita de ahora en más. jugar bien al fútbol es no poner jugadores como cambiasso que no hacen nada. o hacer un cambio con lucho gonzález para ver si está patinable la cancha. jugar bien al fútbol es poner la garra de ayala, o la corrida en diagonal de crespo (y que no salió en offside por primera vez en mucho tiempo) pero que no vio saviola y se la pasó -un poco larga- a maxi lópez. jugar bien al fútbol es pasarla bien y transmitir eso a la tribuna y que la tribuna lo sienta y se relaje. ojo, podés perder así, pero perdés jugando al fútbol. si nuestro compañero piensa que el otro día se jugó bien al fútbol, we are in fucking trouble.